Durante este proceso y si hablamos de un embarazo normal y sin mayores complicaciones, la guagua ya está acomodada para nacer en cualquier momento. El lanugo por el cual está cubierto su cuerpo –que se trata de un vello suave y delgado– ya está por desaparecer y se irá con totalidad durante sus primeros días de vida.
Para tranquilizar a la madre y reducir los temores, durante la preparación del nacimiento ambos padres reciben educación por parte del equipo tratante en relación a lo que se van a enfrentar próximamente.
Lo anterior, permite conocer formas de manejar el dolor y reducir las molestias provocadas por el trabajo de parto, pues existen diferentes métodos para hacer más llevadero el proceso. Es importante recordar que las contracciones uterinas, pueden verse aumentadas por la estimulación mamaria o por relaciones sexuales.
Cuando el trabajo de parto se inicia, es difícil detenerlo y si se trata de un primer embarazo puede durar de 12 a 18 horas hasta alcanzar la dilatación completa.
La dilatación es la fase más larga del trabajo de parto. Cuando se está en etapas iniciales puede ayudar a la madre el caminar o, en algunos casos, recostarse e intentar dormir. También, tomar una ducha o baño de tina caliente, escuchar música relajante y hacer ejercicios de respiración.
Lo más importante es que la madre esté tranquila y contenida por su pareja, pues el nacimiento de su hijo ya está muy cerca y no queda nada para poder conocerlo y disfrutar esta nueva etapa.
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