Actualización al 2024
La disfagia es una condición médica donde la persona tiene o refiere dificultad para tragar alimentos, líquidos o incluso saliva.
Esta dificultad puede ocurrir en cualquier fase del proceso de alimentación, desde la boca hasta el estómago.
La disfagia puede ser un síntoma de diversos trastornos, incluidos problemas neurológicos, daño muscular o bloqueos en la garganta o el esófago.
El Centro de Voz y Deglución de Clínica Universidad de los Andes está enfocado en aquellos pacientes que presentan problemas de la voz que perjudican su vida laboral y social. Asimismo, aborda alteraciones de la deglución, es decir, la dificultad para tragar de manera segura o eficiente alimentos, líquidos e incluso saliva, lo que conlleva complicaciones respiratorias y desnutrición.
Su equipo está conformado por otorrinolaringólogos y fonoaudiólogos especialistas en problemas de laringe, voz y deglución; nutricionistas, y una enfermera encargada de la educación, coordinación y seguimiento. El foco es el diagnóstico y tratamiento multidisciplinario de las enfermedades relacionadas.
Cuenta con un completo laboratorio de voz y deglución, en el que se efectúan evaluación y medición objetiva de parámetros acústicos y aerodinámicos de la voz para valorar la eventual mejoría. Respecto a la deglución, permite complementar y fortalecer la evaluación inicial del paciente y, a través de diferentes aplicaciones, colaborar en el manejo terapéutico, acelerando la mejoría.
Existen dos tipos principales de disfagia:
Las causas pueden ser variadas:
Algunos signos que pueden indicar la presencia de esta alteración de la deglución son:
La identificación temprana de la disfagia evita resultados adversos de salud, por lo que no hay que normalizar signos como tos, atoramiento, ahogo o esfuerzo al comer, que son señales de alarma de que el cuerpo no está realizando bien esta función.
No
siempre es posible prevenirla, ya que a menudo está asociada a condiciones subyacentes, como
condiciones neurológicas o degenerativas, o bien, es propio del proceso de
envejecimiento. Sin embargo, existen medidas, terapias y ejercicios que ayudan
a optimizar el funcionamiento de la deglución, mejorando el confort del
paciente al alimentarse, y la seguridad para evitar complicaciones que pueden
derivar del paso de alimento a la vía aérea.
En el proceso diagnóstico el otorrinolaringólogo puede requerir el apoyo de otras especialidades, según sea el caso. Otorrinolaringólogo y fonoaudiólogo suelen trabajar mano a mano en el diagnóstico de estos pacientes. La evaluación clínica funcional del fonoaudiólogo y, posteriormente, el examen fibroendoscópico funcional de la deglución realizada por el otorrinolaringólogo, son claves en el diagnóstico de esta patología. Existe un examen radiológico que en algunas situaciones complementa los anteriores, siendo muy útil, llamado videofluoroscopía.
En estos pacientes, en especial cuando se sospecha una alteración esofágica como causa de la disfagia, es fundamental realizar un trabajo en equipo con un gastroenterólogo. Existen exámenes útiles para el estudio de la funcionalidad y anatomía del esófago, como la manometría de alta resolución, endoscopía digestiva alta, pHmetría. Estos exámenes son realizados habitualmente por el gastroenterólogo.
Con un diagnóstico oportuno es posible dar recomendaciones específicas, estrategias, compensaciones y ejercicios para optimizar y mejorar la eficacia, seguridad y comodidad durante la alimentación.
El tratamiento puede ser:
Además, nuestro Centro cuenta con tecnología de punta para complementar la rehabilitación de los trastornos de la deglución realizada por fonoaudiología.
Dentro de estos equipos podemos mencionar:
El Centro de Voz y Deglución de Clínica Universidad de los Andes está enfocado en aquellos pacientes que presentan problemas de la voz que perjudican su vida laboral y social. Asimismo, aborda alteraciones de la deglución, es decir, la dificultad para tragar de manera segura o eficiente alimentos, líquidos e incluso saliva, lo que conlleva complicaciones respiratorias y desnutrición.
Su equipo está conformado por otorrinolaringólogos y fonoaudiólogos especialistas en problemas de laringe, voz y deglución; nutricionistas, y una enfermera encargada de la educación, coordinación y seguimiento. El foco es el diagnóstico y tratamiento multidisciplinario de las enfermedades relacionadas.
Cuenta con un completo laboratorio de voz y deglución, en el que se efectúan evaluación y medición objetiva de parámetros acústicos y aerodinámicos de la voz para valorar la eventual mejoría. Respecto a la deglución, permite complementar y fortalecer la evaluación inicial del paciente y, a través de diferentes aplicaciones, colaborar en el manejo terapéutico, acelerando la mejoría.