Cirugía revirtió severo daño renal en recién nacido
La detección prenatal fue vital para tratar el caso de Tomás Orellana, quien sufría una obstrucción en el riñón derecho.
El 3 de abril de este año nació Tomás Orellana, el primer hijo de Francisca y Daniel. Cuando tenía sólo un mes tuvo que ser sometido a una compleja cirugía para revertir el daño renal con el que nació. Su mamá, Francisca Quintanilla, cuenta que en una ecografía durante la semana 17, el Dr. Enrique Oyarzún, ginecólogo de Clínica Universidad de los Andes, le explicó que Tomás tenía una obstrucción pieloureteral en su riñón derecho. Esta malformación se genera cuando hay una obstrucción en la salida de la orina, provocando una complicación renal importante.
“Cuando el doctor nos dio la noticia sentí mucho miedo. Pensé en qué había hecho mal y en cómo podía ayudar a mi hijo. Fue un momento muy duro y difícil”, recuerda Francisca.
El Dr. Enrique Oyarzún explica que “el manejo prenatal en este tipo de casos es primordial porque el objetivo es detectar situaciones que comprometan la salud del feto o recién nacido. Para eso es importante descartar otras anomalías congénitas y examinar cada dos o tres semanas la cantidad de líquido amniótico. A Francisca la controlamos regularmente para ver los avances, y le informamos que la evaluación final del caso de Tomás sería después de su nacimiento”.
El parto de Tomás se dio en perfectas condiciones. Nació a la semana 39, pesó poco más de 3 kilos y midió 49 centímetros. Sin embargo, había que conocer su estado renal. Con 24 horas de vida el Dr. Pedro Zambrano, nefrólogo pediátrico de Clínica Universidad de los Andes, indicó una ecografía que demostró índices normales. Luego de un mes repitieron el mismo examen, esta vez con resultados alterados. El diagnóstico mostraba que la pelvis renal estaba dilatada y había una obstrucción en el paso de la orina, desde esa zona hasta el uréter. La cirugía era inminente.
El Dr. César Pinilla, cirujano pediátrico de Clínica Universidad de los Andes, explica que “para revertir la patología de Tomás, realizamos una cirugía que consistió en extirpar el sector estrecho del sistema urinario, y unirlo para que la orina circulara en forma normal, sin acumularse ni retenerse en la pelvis del riñón. La intervención era muy importante, ya que si no se llevaba a cabo el riñón perdería su función lentamente”, enfatiza el especialista.
Francisca y su marido tenían mucho temor e incertidumbre durante el procedimiento. “Estábamos muy nerviosos, pero siempre sentimos el apoyo del equipo, y el doctor nos dejó acompañar a nuestro hijo en pabellón. Para nosotros eso fue muy valioso”, sostiene.
La cirugía fue exitosa y se lograron excelentes resultados. “Tomás puede hacer una vida normal. Sólo requiere controles de seguimiento con ecografía renal y pruebas de la función de sus riñones”, enfatiza el especialista.
Actualmente, está en perfectas condiciones y crece fuertemente junto a su familia en Putú, pueblo ubicado en la séptima región. “Es un niño coqueto, alegre, regalón, curioso y valiente”, finaliza Francisca.
CIRUGÍA PEDIÁTRICA
La Unidad de Pediatría y Cirugía Infantil de Clínica Universidad de los Andes está centrada en la atención integral del niño y su familia. Ponemos a su disposición personal médico, de enfermería y técnicos paramédicos altamente capacitados; una acogedora infraestructura y tecnología de última generación para resolver todas aquellas patologías que puedan afectar a nuestros pacientes, desde el periodo neonatal hasta la adolescencia.
La Clínica cuenta con una amplia gama de áreas de atención, tales como: consulta ambulatoria de Pediatría general y especialidades, Vacunatorio, Clínica de Lactancia, Servicio de Urgencia las 24 horas y un Servicio de Hospitalización Médico y Quirúrgico con Unidad de Paciente Crítico (UPC) Neonatal y Pediátrico.
“Cuando el doctor nos dio la noticia sentí mucho miedo. Pensé en qué había hecho mal y en cómo podía ayudar a mi hijo. Fue un momento muy duro y difícil”, recuerda Francisca.
El Dr. Enrique Oyarzún explica que “el manejo prenatal en este tipo de casos es primordial porque el objetivo es detectar situaciones que comprometan la salud del feto o recién nacido. Para eso es importante descartar otras anomalías congénitas y examinar cada dos o tres semanas la cantidad de líquido amniótico. A Francisca la controlamos regularmente para ver los avances, y le informamos que la evaluación final del caso de Tomás sería después de su nacimiento”.
El parto de Tomás se dio en perfectas condiciones. Nació a la semana 39, pesó poco más de 3 kilos y midió 49 centímetros. Sin embargo, había que conocer su estado renal. Con 24 horas de vida el Dr. Pedro Zambrano, nefrólogo pediátrico de Clínica Universidad de los Andes, indicó una ecografía que demostró índices normales. Luego de un mes repitieron el mismo examen, esta vez con resultados alterados. El diagnóstico mostraba que la pelvis renal estaba dilatada y había una obstrucción en el paso de la orina, desde esa zona hasta el uréter. La cirugía era inminente.
El Dr. César Pinilla, cirujano pediátrico de Clínica Universidad de los Andes, explica que “para revertir la patología de Tomás, realizamos una cirugía que consistió en extirpar el sector estrecho del sistema urinario, y unirlo para que la orina circulara en forma normal, sin acumularse ni retenerse en la pelvis del riñón. La intervención era muy importante, ya que si no se llevaba a cabo el riñón perdería su función lentamente”, enfatiza el especialista.
Francisca y su marido tenían mucho temor e incertidumbre durante el procedimiento. “Estábamos muy nerviosos, pero siempre sentimos el apoyo del equipo, y el doctor nos dejó acompañar a nuestro hijo en pabellón. Para nosotros eso fue muy valioso”, sostiene.
La cirugía fue exitosa y se lograron excelentes resultados. “Tomás puede hacer una vida normal. Sólo requiere controles de seguimiento con ecografía renal y pruebas de la función de sus riñones”, enfatiza el especialista.
Actualmente, está en perfectas condiciones y crece fuertemente junto a su familia en Putú, pueblo ubicado en la séptima región. “Es un niño coqueto, alegre, regalón, curioso y valiente”, finaliza Francisca.
CIRUGÍA PEDIÁTRICA
La Unidad de Pediatría y Cirugía Infantil de Clínica Universidad de los Andes está centrada en la atención integral del niño y su familia. Ponemos a su disposición personal médico, de enfermería y técnicos paramédicos altamente capacitados; una acogedora infraestructura y tecnología de última generación para resolver todas aquellas patologías que puedan afectar a nuestros pacientes, desde el periodo neonatal hasta la adolescencia.
La Clínica cuenta con una amplia gama de áreas de atención, tales como: consulta ambulatoria de Pediatría general y especialidades, Vacunatorio, Clínica de Lactancia, Servicio de Urgencia las 24 horas y un Servicio de Hospitalización Médico y Quirúrgico con Unidad de Paciente Crítico (UPC) Neonatal y Pediátrico.
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