¿Comer o alimentarse?
Actualmente contamos con una gran variedad de alimentos que podemos consumir. Si bien muchos de ellos nos entregan nutrientes, vitaminas y minerales que el cuerpo necesita, hay muchos que no tienen ningún valor nutricional y que sólo aportan calorías de más.
Entre esos componentes el azúcar es el favorito de muchos. Si bien los productos dulces producen una sensación placentera al comer, su consumo desmedido genera daño y afecta considerablemente la salud.
La Dra. Eliana Reyes, nutrióloga e integrante del programa de Obesidad y Diabetes de Clínica Universidad de los Andes, explica que “el azúcar entrega calorías vacías, que no aportan nutrientes fundamentales para la salud, por lo tanto, debemos ser cuidadosos con su consumo. Una manera saludable de ingerirla es en frutas, que además entregan vitaminas y minerales que benefician el organismo”.
Tener una alimentación consiente es fundamental para lograr una buena salud. En ese contexto, es primordial priorizar el consumo de verduras, frutas, carnes bajas en grasas, pescados y fibra que beneficiarán al organismo.
La especialista señala que una adecuada alimentación no sólo permite tener un peso adecuado. “También fortalece el sistema inmunológico y se reducen los riesgos de contraer enfermedades cardiovasculares y diabetes mellitus tipo II, que se produce por resistencia a la insulina. Eso ocurre por altos niveles de azúcar en la sangre y quienes tienen esta patología generalmente son personas con sobrepeso u obesidad, o que tienen el hígado graso”.
Pasteles, tortas, papas fritas y hamburguesas son sólo algunos productos de una larga lista. Si bien existen muchas tentaciones, es importante saber algunas recomendaciones.
La Dra. Eliana Reyes entrega algunos consejos para tener una correcta alimentación:
- Consumir alimentos bajos en grasas: preferir grasas saludables, presentes en la palta, aceite de oliva, salmón o frutos secos.
- Controlar el consumo de carbohidratos: estos se transforman en azúcar.
- Las porciones deben ser moderadas.
- Aumentar el contenido en fibra: mejora la digestión y baja el colesterol.
- Ingerir vitaminas, minerales presentes en las frutas y verduras que también aportan antioxidantes.
- Moderar el azúcar y el consumo de sal: ingerir el azúcar de la fruta y consumir poca sal porque es perjudicial para el corazón.
- Mejorar los hábitos alimenticios y tomar conciencia de lo que comemos, tendrá un impacto positivo en el cuerpo y nos mantendrá más sanos y fuertes.
La Dra. Eliana Reyes, nutrióloga e integrante del programa de Obesidad y Diabetes de Clínica Universidad de los Andes, explica que “el azúcar entrega calorías vacías, que no aportan nutrientes fundamentales para la salud, por lo tanto, debemos ser cuidadosos con su consumo. Una manera saludable de ingerirla es en frutas, que además entregan vitaminas y minerales que benefician el organismo”.
Tener una alimentación consiente es fundamental para lograr una buena salud. En ese contexto, es primordial priorizar el consumo de verduras, frutas, carnes bajas en grasas, pescados y fibra que beneficiarán al organismo.
La especialista señala que una adecuada alimentación no sólo permite tener un peso adecuado. “También fortalece el sistema inmunológico y se reducen los riesgos de contraer enfermedades cardiovasculares y diabetes mellitus tipo II, que se produce por resistencia a la insulina. Eso ocurre por altos niveles de azúcar en la sangre y quienes tienen esta patología generalmente son personas con sobrepeso u obesidad, o que tienen el hígado graso”.
Pasteles, tortas, papas fritas y hamburguesas son sólo algunos productos de una larga lista. Si bien existen muchas tentaciones, es importante saber algunas recomendaciones.
La Dra. Eliana Reyes entrega algunos consejos para tener una correcta alimentación:
- Consumir alimentos bajos en grasas: preferir grasas saludables, presentes en la palta, aceite de oliva, salmón o frutos secos.
- Controlar el consumo de carbohidratos: estos se transforman en azúcar.
- Las porciones deben ser moderadas.
- Aumentar el contenido en fibra: mejora la digestión y baja el colesterol.
- Ingerir vitaminas, minerales presentes en las frutas y verduras que también aportan antioxidantes.
- Moderar el azúcar y el consumo de sal: ingerir el azúcar de la fruta y consumir poca sal porque es perjudicial para el corazón.
- Mejorar los hábitos alimenticios y tomar conciencia de lo que comemos, tendrá un impacto positivo en el cuerpo y nos mantendrá más sanos y fuertes.