¿De qué depende una buena cicatrización?
Cuando la piel sufre una herida, el cuerpo reacciona generando nuevo tejido dérmico y reepitelización, dando origen a lo que conocemos como cicatriz, las cuales pueden variar en su aspecto y también en el tiempo que tardan en desarrollarse.
La Dra. Pilar Bofill, dermatóloga de Clínica Universidad de los Andes, señala que una buena cicatrización depende de diversos factores:
• Edad: las personas mayores tienen una cicatrización más lenta.
• Estado nutricional: personas mal nutridas, incluídas las obesas, tienen peor cicatrización
• Enfermedades sistémicas: patologias como la diabetes mellitus, mesenquimopatías, hipertensión arterial y tabaquismo crónico, entre otras, están asociadas a problemas de cicatrización, especialmente si no están compensadas.
• Trastornos de la circulación
• Infección de la zona afectada
• Medicamentos que alteran la cicatrización, por ejemplo, isotretinoína oral.
Estos factores pueden incidir en el tipo de cicatriz que se desarrolle, que puede ser normal, atrófica, hipertrófica, queloídea o viciosa:
• Normales: de color rosado, que con el tiempo pueden adquirir más o menos la misma coloración que la piel vecina; se hunden cuando se palpan; no están adheridas a planos vecinos: la epidermis es más delgada y no tiene anexos cutáneos, como pelo o glándulas.
• Atróficas: se caracterizan por un menor espesor de la piel y porque quedan en un nivel más bajo que la piel vecina.
• Hipertróficas: están levantadas pero no traspasan el área de daño original; a veces tienen un color violáceo, son induradas y pueden tener vasos sanguíneos pequeños y dilatados en su superficie (telangiectasias).
• Queloide: cicatriz hipertrófica, que se extiende más allá de los límites originales de la herida. Tiende a persistir por más de 12 meses y presenta tendencia a reaparecer si es extirpada.
• Viciosas: son adherentes y retráctiles. Pueden producir deformaciones.
“Algunos productos de la medicina alternativa tienen descritas propiedades favorecedoras de la cicatrización, como el aloe vera, miel, caléndula o maravilla, taninos y árnica. Sin embargo, no siempre se recomiendan pues su uso puede producir reacciones de irritación o alergia”, señala la Dra. Pilar Bofill.
Existen además variedades de apósitos para diferentes tipos de heridas, que deben ser indicados por especialistas.