Investigación y Docencia: Mortalidad por cáncer de testículo en Chile: ¿Es tan alta como pensamos?
Un equipo de internos de la Facultad de Medicina de la Universidad de los Andes, dirigidos por sus profesores, los Dres. Luis Fernando Coz e Iván Sáez, publicaron una revisión de todos los casos de pacientes con diagnóstico de cáncer testicular atendidos en el Hospital Militar de Santiago entre 1978 y 2019.
Según registros nacionales e internacionales, Chile tiene la tasa de mortalidad por cáncer de testículo más alta a nivel mundial, superando ampliamente a otros países. Es así como, según el Departamento de Estadística e Información del Ministerio de Salud de Chile (DEIS), entre los años 2003 y 2007 hubo un promedio de 94 muertes por año.
De acuerdo a GLOBOCAN, en 2018, hubo 115 fallecidos, lo que implica que 0.40% de todas las muertes por cáncer ese año, se debieron a cáncer testicular. Cifra más alta que en Argentina y Perú, que tienen 0.3%, y que Francia y Estados Unidos con un 0.08% y 0.07%, respectivamente.
El propósito del estudio publicado en la revista Archive of Urological Research, era contrastar este récord mundial con la experiencia clínica de los urólogos. El cáncer testicular es una enfermedad que tiene muy buen pronóstico, con una curación cercana al 90% en cualquier etapa. Igualmente, está incluido como patología GES y en Chile se cuenta con acceso a todos los tratamientos de vanguardia estandarizados en los países más desarrollados.
Los casos más complejos son aquellos en que el paciente consulta tardíamente y con enfermedad muy avanzada, lo que es cada vez menos frecuente, pues los testículos están fácilmente al alcance del autoexamen.
“Por eso, las cifras de mortalidad nos llamaron mucho la atención, ya que rara vez vemos pacientes fallecer por cáncer de testículo”, afirma el Dr. Iván Sáez.
Resultados del Estudio
Se identificó a todos los pacientes que habían sido diagnosticados y tratados por cáncer testicular entre los años 1978 y 2019 en el Hospital Militar de Santiago (principal campo clínico de la Universidad de los Andes).
En este periodo de 41 años, hubo 255 personas diagnosticadas y tratadas por cáncer testicular. Al momento de la revisión de datos, se identificó que, de este grupo, 16 pacientes habían fallecido. En cinco de ellos, el certificado de defunción rotulaba el cáncer testicular como causa de su fallecimiento. Se constató que, de estas personas, dos habían tenido el cáncer en estadio muy temprano, completaron más de cinco años de seguimiento y fueron dados de alta porque estaban sanos y sin recaída, por lo que no es razonable atribuir este cáncer como causa de su deceso. En otras palabras, en esta serie, solo tres de las 255 personas diagnosticadas con esta enfermedad, habrían verdaderamente fallecido como consecuencia de un cáncer testicular.
Si el 40% de los pacientes que tiene cáncer testicular como causa de fallecimiento, se han registrado de manera incorrecta en el certificado de defunción, ello sería una posible explicación de la supuesta alta mortalidad en Chile.
“Si esto fuera así, estaríamos lejos de ostentar el triste récord mundial que hoy nos hace figurar con la más alta mortalidad por cáncer de testículo del mundo. Sospecho que no somos merecedores de ese récord”, concluye el Dr. Luis Fernando Coz.