Cómo sobrellevar las altas temperaturas pronosticadas para este verano
Según la Organización Meteorológica Mundial (OMS), se espera que el actual fenómeno de El Niño se extienda, al menos, hasta abril de 2024, contribuyendo al aumento de las temperaturas tanto en la tierra como en el océano.
El Niño se produce por cada dos o siete años y suele durar entre nueve y doce meses. Se trata de un patrón climático natural asociado al calentamiento del océano Pacífico, pero se produce en el contexto de un clima alterado por las actividades humanas.
Así, se anticipa el verano más caluroso de la historia en Santiago y también en regiones como Maule, Ñuble y Bío Bío, con temperaturas que se prevé sobrepasarán los 40°C.
Al respecto, el Dr. Luis Herrada, Jefe del Servicio de Urgencia de Clínica Universidad de los Andes, comenta que “los eventos de calor extremo son mucho más mortales de lo que la gente suele creer, ya que el cuerpo trabaja más duro para mantener la temperatura normal, por lo que es muy importante conocer los síntomas y signos de las enfermedades relacionadas con el calor para actuar a tiempo”.
Los adultos mayores, los niños, los enfermos crónicos y las personas con sobrepeso corren un mayor riesgo de sufrir calor extremo.
Las emergencias debidas al calor tienen tres etapas:
- Calambres: dolores o espasmos musculares en el estómago, brazos o piernas.
- Agotamiento por calor: sudoración intensa, palidez, calambres musculares, cansancio, debilidad, pulso rápido o débil, mareos, dolor de cabeza, desmayos, náuseas, vómitos.
- Golpe de calor: temperatura corporal extremadamente alta (sobre 39°C); piel enrojecida, caliente y seca sin sudor; pulso rápido y fuerte; mareos; confusión o pérdida del conocimiento.
“Si tiene signos de calambres o agotamiento por calor, la recomendación es buscar un lugar más fresco, enfriar el cuerpo con agua, quitarse el exceso de ropa y tomar sorbos de agua o bebidas deportivas. Si los síntomas empeoran o se extienden por más de una hora, es recomendable acudir a un servicio de urgencia”, enfatiza el Dr. Herrada.
Preparar el hogar para enfrentar las altas temperaturas
- Cubrir las ventanas con cortinas o persianas y mantenerlas cerradas durante las horas de mayor calor.
- Sellar puertas y ventanas con huincha aislante para evitar que entre el aire caliente.
- Utilizar reflectores de ventana diseñados específicamente para reflejar el calor hacia el exterior.
- Identificar lugares en el barrio que cuenten con aire acondicionado donde se pueda ir para refrescar, como bibliotecas o centros comerciales.
- Considerar instalar aire acondicionado de ventana y aislarlos alrededor.
- Se puede utilizar ventiladores, los que permiten movilizar el aire. Sin embargo, no reducen la temperatura ambiente.
Consejos para mantenerse a salvo
- Tomar duchas o baños fríos.
- Utilizar ropa holgada, liviana y de colores claros.
- Usar anteojos de sol con protección UV y sombrero.
- Mantener la piel húmeda, usando una botella con atomizador o una esponja húmeda.
- Remojar una toalla en agua fría y envolverla sin apretar alrededor del cuello y cabeza.
- Reducir el uso del horno para no aumentar la temperatura del hogar.
- Si se tiene que salir, buscar la sombra.
- Beber agua incluso antes de sentir sed, especialmente si está al aire libre o practicando actividad física.
- Evitar actividades de alta energía, la realización de ejercicio o trabajo al aire libre, especialmente entre las 11:00 y 17:00 hrs.
- Estar atento a los calambres, el agotamiento por calor y la insolación.
- Consumir mayormente ensaladas, verduras, frutas o jugos naturales que ayuden a reponer líquidos y sales minerales perdidas por el exceso de sudoración.
- Evitar el consumo excesivo de alcohol, las bebidas que contienen mucha cafeína y las comidas abundantes, ya que favorecen la deshidratación.
- Ventilar adecuadamente los automóviles antes de subirse, bajando ventanas o abriendo las puertas de modo de evitar golpes de calor.
- Nunca dejar personas o mascotas dentro del auto cerrado.
- Aplicar protector solar (SPF 30+) cada dos horas o después de bañarse y/o transpirar.
No hay que olvidar a las mascotas. Si estas están afuera, hay que asegurarse de que tengan suficiente agua fría y acceso a una sombra cómoda. Además, el asfalto y el pavimento oscuro pueden resultar muy calientes para sus patas.