Estar alerta a las señales es fundamental para prevenir el suicidio
En Chile, el año 2019 murieron 1.900 personas por suicidio, de acuerdo a cifras del Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS), entidad que califica estas muertes como lesiones autoinfligidas intencionalmente. Esta cifra corresponde a 77 casos más que el año 2018.
Además, desde el comienzo de la pandemia de Covid-19, las consultas por suicidio e intento de suicidio han aumentado considerablemente, ya que la salud mental se ha visto muy afectada. Esto, porque ha habido un aumento de cuadros de ansiedad, depresión y violencia intrafamiliar, así como también de descompensaciones de enfermedades psiquiátricas previas e incremento de consumo de alcohol o drogas.
El suicidio es uno de los temas que los especialistas también han considerado como posible consecuencia de esta pandemia. "El aislamiento que vivimos durante las cuarentenas pudo gatillar enfermedades de salud mental que deriven en ideas o intentos suicidas, por lo que debemos estar muy atentos a ciertas señales para consultar a tiempo y prevenirlo”, explica el Dr. Francisco Bustamante, psiquiatra de Clínica Universidad de los Andes y líder del programa RADAR (Red para la Atención y Derivación de Adolescentes en Riesgo).
Con respecto a las señales de alerta, el especialista afirma que es muy importante contar con las herramientas tanto para evitar y tratar enfermedades de salud mental que puedan derivar en suicidio, como para obtener ayuda adecuada y oportuna, y también para estar atentos a las señales que pueda entregar una persona que esté pensando en tomar esta decisión.
¿Cómo reconocer estas señales?
El Dr. Bustamante explica que entre las más comunes están:
- Baja en el rendimiento laboral o escolar
- Aislamiento
- Cambios de humor
- Consumo de alcohol o drogas
- Deseos de hacerse daño o de morirse
¿Qué hacer cuando se identifica a una persona que puede estar desarrollando ideas suicidas?
- Estar especialmente alertas a identificar el peligro de suicidio frente a personas con trastornos psiquiátricos, y en particular a quienes padecen depresión, trastorno bipolar, alcoholismo o esquizofrenia.
- Hacer seguimiento de las personas que han cometido intentos de suicidio o presentado ideación suicida.
- Reducir el acceso a los medios para suicidarse de las personas en riesgo (medicamentos, armas de fuego, etc.).
- Buscar ayuda especializada.
“Al detectar un posible caso, se sigue un protocolo de atención que consiste en cuantificar el nivel de riesgo: leve, moderado o severo. En este último caso, son hospitalizados. De lo contrario, quedan bajo cuidado de un adulto, con apoyo de un psiquiatra”, explica el Dr. Bustamante.
Para tomar conciencia de este tema, cada 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, iniciativa que busca dar a conocer señales de alerta y las herramientas necesarias para que toda la población esté atenta.
Una vez que la persona ya está estabilizada, se inicia otra intervención para identificar y tratar la causa que los llevó al riesgo suicida, como disfunciones familiares o antecedentes de trastornos psiquiátricos.
“Es importante recalcar que las muertes por suicidio se pueden prevenir y ese es el mensaje principal de este día mundial de prevención del suicidio”, concluye el Dr. Bustamante.
El Programa RADAR, de la Universidad de los Andes, puso a disposición el libro “No estás sol@: prevenir el suicidio es posible”, el que puede ser descargado de forma gratuita en el sitio Ayudaradar.cl. Su objetivo es contribuir a que las familias o cualquier persona pueda detectar y apoyar de forma temprana a adolescentes que se encuentren en riesgo suicida.