Proyecto de Lectura Fácil sobre COVID-19

Gracias a una colaboración entre la Clínica Universidad de los Andes,  y la misma casa de estudios, fue posible la elaboración de un documento sobre el Covid-19 en formato de “Lectura fácil”. El objetivo es que personas con discapacidad cognitiva, entre otras condiciones, puedan comprender de manera más fácil el contenido.

Un grupo de investigadoras expertas en temas de inclusión de la Facultad de Psicología, junto a académicas de la Universidad Católica, desarrollaron el documento con información proporcionada por nuestros especialistas y que se encuentra en el sitio de coronavirus de la página web de la Clínica.

“Lectura Fácil” es un servicio que permite escribir y adaptar textos que han escrito otras personas, de acuerdo a normas y principios internacionales, que validan su comprensión.

El resultado es un texto equivalente, en cuanto a sus contenidos e información general, al documento original. Además, utiliza imágenes como apoyo a la comprensión. Así, se garantiza que el mensaje podrá ser entendido por un grupo amplio de personas, entre quienes se incluye a:

-       Personas con discapacidad intelectual

-       Inmigrantes recientes que no manejan bien el lenguaje

-       Personas con Trastorno Específico de la Lectura

-       Personas con analfabetismo funcional

-       Personas con sordera prelocutiva o sordociegas

-       Personas con afasia

-       Personas con Trastornos del Espectro Autista, especialmente cuando se acompaña de Trastornos del Lenguaje y Discapacidad Intelectual asociados.

-       Personas con Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad

-       Estudiantes de escuelas primarias que están en proceso de desarrollo o consolidación del proceso lector

-       Adultos mayores

La producción de textos en lectura fácil es parte de los “ajustes razonables” delimitados en la Convención sobre Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD; UN, 2008), ya que facilita el acceso y la comprensión de la información escrita en personas que requieren algún nivel de apoyo para su total participación social.

Asimismo, permite cumplir normativas nacionales vigentes como el derecho a recibir toda la información sobre procedimientos y tratamientos médicos en forma comprensible según lo estipulado en la Ley 20.584 de 2012.