Baja tasa de cesáreas

La cesárea es una intervención quirúrgica que involucra mayor riesgo que un parto normal o vaginal para la mujer, pues se elevan las posibilidades de complicaciones como hemorragias, infecciones e incluso leve incremento de mortalidad. El tiempo de recuperación es más largo y muchas veces se acompaña de mayor dolor que el parto vaginal.

Además, el estrés del trabajo de parto contribuye al estímulo de respiración en los primeros minutos de vida.

Por estas y otras razones, la Organización Mundial de la Salud ha llamado la atención por el alto porcentaje de cesáreas que se realizan a nivel mundial. En Chile, la situación no deja de ser preocupante, durante los últimos años, ha presentado un porcentaje superior al 40%, realidad que nos sitúa dentro de los países con más altas tasas de cesáreas de la OCDE, considerando que el promedio de los países que componen esta entidad es de 32%, aproximadamente.

En el caso de Clínica Universidad de los Andes, este porcentaje se ha logrado reducir a menos de 30%, lo que se refleja en una medición realizada durante el primer trimestre de 2023 por el Comité Regional de Vigilancia de Indicación de Cesárea de la Seremi de Salud de la Región Metropolitana.

Esto ha sido posible gracias al esfuerzo en la Maternidad de la Clínica: “como equipo médico, estamos convencidos de los beneficios del parto vaginal por sobre la cesárea. Por eso, respetamos los tiempos del comienzo del trabajo de parto, se realizan pocas inducciones, esperamos inicio de trabajo de parto hasta las 41 semanas y recurrimos a una cesárea solo cuando es lo más recomendable para el bienestar de la paciente y de la guagua, lo que es un índice de la calidad de nuestra Maternidad”, señala el Dr. Horacio Figueroa, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia.

Sin embargo, sí hay situaciones en que la intervención quirúrgica se hace necesaria, como cuando se ha tenido dos cesáreas anteriormente, asfixia o desproporción céfalo-pélvica, entre otras.

Análisis de la tasa de cesáreas por grupos de Robson en Clínica Universidad de los Andes

Parte del equipo materno-fetal de nuestra Clínica publicó un estudio que corresponde a un reporte que demuestra en forma científica la baja tasa de cesáreas de nuestra Maternidad, lo que, aunque no es una estadística vital, se ha reconocido como un indicador de la calidad de atención. Además, explica cómo se logró, considerando desde el inicio hasta los primeros 5000 nacimientos.

Habitualmente, las cesáreas son clasificadas según el motivo por el cual se realizan: asfixia, desproporción cefalopélvica, macrosomía fetal, cesárea previa o podálica, entre otras causas más infrecuentes. En tanto, los grupos de Robson fueron creados por un médico irlandés para analizar las tasas de cesáreas no por la indicación de estas, sino por grupos que tienen las mismas características. Por ejemplo, el grupo 1 de Robson corresponde a primigestas que tienen un trabajo de parto espontáneo, el grupo 2 son las primigestas con trabajo de parto inducido, el grupo 8 corresponde a embarazos múltiples, y así se clasifican en 10 grupos. En la actualidad, esta es la forma estándar de analizar la tasa de cesárea en los hospitales.

El resultado obtenido fue una tasa de 27,9% en el periodo de estudio. El grupo 5 de Robson, que considera pacientes con una o más cesáreas previas, mostró una elevada tasa (68%) y contribuyó con el 36% de todas las cesáreas efectuadas en la Clínica. Por el contrario, el grupo 3, de multíparas con trabajo de parto espontáneo, tuvo una tasa del 1,8% y contribuyó al 0,4% de las cesáreas. También, se encontró que los profesionales que usan fórceps realizan menos cesáreas. “Concluimos que las pacientes con cesárea anterior son un grupo donde pueden concentrarse mayores esfuerzos para bajar la tasa global”, asegura el Dr. Masami Yamamoto, ginecoobstetra y quien lideró el estudio.

Sobre cómo se ha logrado tener bajas tasas de cesáreas y mantenerlas en los diez años de existencia de la Clínica, el ginecólogo destaca factores como tener una tasa de inducciones relativamente baja; pruebas de trabajo de parto prolongadas, lo que incide en más casos que pueden concluir en parto vaginal.

“Esto demuestra que el resultado de buena calidad de atención médica, en este caso reflejado en la baja tasa de cesáreas que tenemos en la Clínica, es finalmente el promedio de los distintos equipos tratantes. A su vez, hay grupos que tienen la mayor tasa, y se pueden concentrar esfuerzos en ellas”, afirma el Dr. Yamamoto.

Talleres de Maternidad

Te invitamos a participar de nuestro taller "Mi Parto en Clínica UANDES: Preparando Nuestro Viaje", actividad sin costo para nuestras pacientes, diseñada por un equipo de profesionales para brindar un acompañamiento integral durante el embarazo, considerando la esfera física y emocional de los futuros padres, y entregando información actualizada y herramientas prácticas para que puedan sentirse preparados y ser protagonistas en todo este proceso.

“Al educar a las pacientes en cuando a la maternidad, las ansiedades y angustias frente a un parto vaginal disminuyen en parte importante y aumenta la probabilidad de éxito, por eso en la Clínica hemos implementado estos talleres gratuitos dirigidos específicamente a pacientes primigestas que tendrán su parto en nuestra Clínica”, explica el Dr. Figueroa.