Las siguientes recomendaciones, han sido elaboradas por el equipo de nutricionistas clínicas, encargadas de la atención de pacientes hospitalizados, para apoyar este importante período en la introducción de alimentos distintos a la leche materna, a través de información actualizada y basada en la evidencia científica disponible, para ayudar a los padres a tomar las mejores decisiones para este proceso.
Mito: Si la madre, padre o hermanos son alérgicos al pescado, debo retrasar su incorporación para evitar que el niño(a) sea alérgico.
Realidad: El pescado puede incorporarse entre los 6-7 meses y este criterio también es válido para niños con antecedentes familiares directos con atopia o alergia alimentaria.
Mito: Debo esperar que el niño tenga piezas dentarias para introducir alimentos sólidos.
Realidad: Entre los 7-8 meses de edad, a pesar de que el niño no presente erupciones dentarias, es capaz de masticar y triturar los alimentos sólidos con las encías, y el retraso en la introducción de este tipo de alimentos puede condicionar la presencia de alteraciones de la masticación en etapas posteriores.
Mito: La alimentación complementaria es igual en niños(as) con lactancia materna que alimentados con fórmulas lácteas.
Realidad: La alimentación complementaria en niños(as) alimentados con fórmula debe tener mayor monitorización en cuanto a aceptación y tolerancia, además del aporte de proteínas ya que la evidencia muestra que el exceso de proteína puede ocasionar mayor adiposidad (acumulación de grasa) en el lactante.
Mito: Solo se deben incluir cereales sin gluten, para evitar que el niño sea celiaco, alérgico o intolerante al gluten.
Realidad: Se recomienda incluir cereales a partir de los 6 meses de vida, incluso aquellos que contienen gluten (trigo, avena, centeno y cebada), aún en niños (as) con antecedentes familiares de primer grado de enfermedad celíaca. No está claro si la introducción de gluten entre los 4-6 meses previene o retarda la aparición de enfermedad celíaca en población general susceptible o en lactantes con antecedentes familiares directos.
Mito: El inicio de la alimentación complementaria siempre debe ser con alimentos tipo papillas-puré.
Realidad: Si bien el método tradicional con cuchara, guiado por los cuidadores (papillas-puré) es la forma tradicional de iniciar la introducción de alimentos, métodos como el BLW o BLISS se pueden utilizar de manera segura, siempre con la asesoría de un profesional de la salud calificado, y de acuerdo con el desarrollo del lactante.
Preparación:
Lave bien sus manos con agua y jabón. Seque sus manos.
Lavar todos los utensilios que va a usar con agua y detergente.
Hierva todos los utensilios durante 5 minutos o use un esterilizador si es la primera vez que los usará, de lo contrario este paso es opcional.
Hierva agua potable durante 5 minutos y deje entibiar.
Vierta la mitad del agua hervida tibia que usará en la mamadera e incorpore la fórmula (utilice la medida del fabricante).
Tape la mamadera y agite hasta que el polvo quede disuelto por completo.
Completar con el volumen de agua restante.
La fórmula se debe dar tibia, no caliente.
*Si requiere calentar la fórmula hacerlo a baño maría o en un bowl con agua caliente.
*Una vez preparada la fórmula, dura 24 hrs refrigerada (no en la puerta).
Ingredientes (1 porción):
Preparación:
Lavar prolijamente las verduras y retirar las partes deterioradas.
En una olla con agua sin sal, poner a cocer la carne, las papas y el arroz. Luego incorporar las verduras.
Si lo deseas puedes cocinar aparte, las verduras al vapor.
Poner todos los ingredientes en la juguera o mini-pimer, procesar y dar consistencia de puré, ocupando la misma agua de cocción.
Medir la porción en una taza según indicaciones, e incorporar el aceite crudo. Mezcle antes de servir.
*En caso de necesitar calentar la papilla, hacerlo a baño maría o al vapor. Evita el microondas para que no pierda sus propiedades.
Ingredientes (1 porción):
Preparación:
Lavar prolijamente las verduras y retirar las partes deterioradas.
En una olla con agua sin sal, poner a cocer el pollo, luego incorpore el brócoli y los fideos. Al final las hojas de espinacas.
Si lo deseas puedes cocinar aparte, las verduras al vapor.
Poner todos los ingredientes en la juguera o mini-pimer, procesar y dar consistencia de puré, ocupando la misma agua de cocción.
Medir la porción en una taza, según indicaciones e incorporar el aceite crudo. Mezcle antes de servir.
*En caso de necesitar calentar la papilla, hacerlo a baño maría o al vapor. Evita el microondas para que no pierda sus propiedades.
Ingredientes (1 porción):
Preparación:
Lavar prolijamente las verduras y retirar las partes deterioradas.
Pelar la zanahoria y el tomate, luego cortar en cubos.
En una olla con agua sin sal, poner a cocer el pavo, luego incorpore la zanahoria y el arroz; finalmente incorpore el tomate.
Si lo deseas puedes cocinar aparte, las verduras al vapor.
Poner todos los ingredientes en la juguera o mini-pimer, procesar y dar consistencia de puré, ocupando la misma agua de cocción.
Medir la porción en una taza, según indicaciones e incorporar el aceite crudo. Mezcle antes de servir.
*En caso de necesitar calentar la papilla, hacerlo a baño maría o al vapor. Evita el microondas para que no pierda sus propiedades.
Ingredientes (1 porción):
Preparación:
Lavar prolijamente la pera, pelarla y cortarla en trozos.
En una olla con agua añadir la pera: dejar cocer hasta que se sienta suave.
Escurrir el agua, dejar enfriar y moler la pera hasta obtener un puré terso y fino.
Ingredientes (1 porción):
Preparación:
Lavar prolijamente el caqui, pelarlo y cortar en trozos.
Poner en el vaso de una mini-pimer o procesadora, triturar bien y servir inmediatamente.
Ingredientes (1 porción):
Preparación:
Lavar prolijamente el plátano, pelarlo y cortar en trozos.
Lavar prolijamente la palta, pelarla y sacar el carozo. Cortar en trozos.
Poner ambos ingredientes en el vaso de una mini-pimer o procesadora, triturar bien y servir inmediatamente.
Ingredientes (8 unidades):
Preparación:
Precalentar el horno a 200° C.
Lavar el zapallo italiano y la zanahoria, luego rallar ambos y reservar.
Batir el huevo en un recipiente e incorporar las verduras.
Finalmente se incorpora el pan rallado y homogenizamos la mezcla manualmente hasta conseguir una masa manejable.
Cubrimos la bandeja del horno con papel antiadherente, hacemos las hamburguesas con una cuchara.
Hornear durante 10-15 minutos.
Ingredientes (8 unidades):
Preparación:
Mezclamos en un recipiente el arroz cocido frío con los huevos batidos.
Añadimos la cebolla picada en cubos y la harina. Rectificamos con harina si fuera necesario hasta conseguir una masa manejable.
Hacemos las hamburguesas y las ponemos en un sartén con antiadherente o en el horno solo para dorar.
Ingredientes (8-10 unidades):
Preparación:
Picar las pechugas de pollo y cocinar sin sal. Luego triturarlas en una procesadora o mini-pimer. También se puede utilizar carne picada finamente.
Partir los tomates y palta en cubos pequeños. Reservar.
Mezclar en un recipiente los ingredientes e incorporar con cuidado.
Tapar con papel film y dejar reposar en el refrigerador por 30 minutos.
Hacer bolitas con la mezcla y aplastarlas ligeramente para hacer las hamburguesas.
Hacemos las hamburguesas y las ponemos en un sartén con antiadherente o en el horno solo para dorar.
Ingredientes (8 unidades):
Preparación:
Precalentar el horno a 180°C.
Pelar y cortar las papas en cubos. Ponerlas a cocer sin sal.
Picar finamente la cebolla y en un sartén antiadherente la doramos con un poco de agua. Añadir los champiñones picados en cubos y los salteamos unos 5 minutos.
Colar las papas, escurrir bien y hacer un puré con un chorrito de aceite de oliva o canola. Añadimos la cebolla con los champiñones.
Añadimos la bebida de arroz sin endulzar, los huevos batidos y mezclamos bien.
Porcionar en moldes para muffins y hornear durante 12-15 minutos.
Ante la imposibilidad de continuar con lactancia materna (LM) o esta sea insuficiente, la alimentación láctea artificial es una alternativa. Lo más recomendado en este caso debiera ser una fórmula de inicio adaptada, la cual cubre los requerimientos nutricionales de lactantes sanos, de término, durante los 12 primeros meses de vida, la cual debe ser indicada por el pediatra a cargo. (Castillo C., 2013)
Más informaciónEl proceso de nutrición implica la participación e interacción entre diferentes sistemas del cuerpo humano: digestivo, neurológico, renal e inmunológico. Es importante conocer y reconocer estos procesos para establecer recomendaciones para la introducción segura de los alimentos de acuerdo con el momento de maduración biológica del lactante. Siempre sigue las recomendaciones del equipo de salud para iniciar este proceso. (Cuadros C., 2017)
Más informaciónLa mamadera solo se debe utilizar en ausencia de LM y debe promoverse como recipiente exclusivo de la fórmula láctea. Se debe retirar paulatinamente a partir del 7° mes de vida y por completo al año, fomentando la utilización del vaso convencional. El uso prolongado de mamadera y chupetes provocan anomalías dentomaxilares. (Romero E., 2016)
Más informaciónEntre los 7-8 meses se deben ir modificando gradualmente la consistencia de los alimentos, pasando de blandos a picados y trozos sólidos. Se recomienda no retrasar el inicio de esta práctica más allá de los 10 meses, aunque el niño no presente erupción dentaria. (Cuadros C., 2017)
Más informaciónSe recomienda suplementar con vitamina D 400 U diarias a todos los lactantes durante el primer año de vida; ya que no hay evidencia suficiente aún para decidir una recomendación acerca de la magnitud de tiempo y condiciones para la exposición al sol del niño pequeño. La vitamina D es esencial para la formación normal de huesos y dientes y su deficiencia provoca raquitismo en niños. (Castillo C., 2013)
Más informaciónLa leche de vaca sin modificaciones (leche en envase tetra pak y leche en polvo en sus distintas variedades no elaboradas exclusivamente para lactantes), es inadecuada para los lactantes menores de un año ya que tiene una concentración excesiva de proteínas, calcio, fósforo y sodio y además es deficiente en ácidos grasos esenciales, vitamina C, E y D. (Maggi A.,2015)
Más informaciónEl método BLW se asocia a mayor duración de la lactancia materna exclusiva, mayor participación en las comidas familiares, mayor regulación en la sensación de saciedad, y menos trabajo al alimentar a los lactantes. (Andries A., 2018)
Más informaciónEl método baby-led weaning (BLW) puede ser una alternativa de alimentación complementaria, sin incrementar el riesgo de deficiencia de hierro, asfixia o deterioro del crecimiento. (Dogan E., 2018)
Más informaciónLos padres que utilizan el sistema tradicional de alimentación, es decir, papillas entregadas con cuchara, tienden a usar más productos comerciales para bebés. Si optas por este sistema de alimentación, se recomienda preparar las papillas en casa con alimentos naturales, para lograr que sean equilibradas y variadas. (Rowan H., 2018)
Más informaciónEn el sistema BLW existe una tendencia a un mayor consumo de verduras porque la exposición temprana y frecuente a los sabores amargos puede aumentar una mayor aceptación de estos sabores cuando los bebés son mayores. (Rowan H., 2018)
Más informaciónSi por convicción de los padres instauran una alimentación vegetariana en el lactante, esta debe ser asesorada por un profesional de la salud calificado, y vigilar estrechamente el crecimiento y neurodesarrollo de éste, ya que estas dietas aportan un alto contenido de fibra, generan una saciedad temprana y pueden condicionar la disponibilidad de micronutrientes, así como de energía y ácidos grasos. (Romero E., 2016)
Más informaciónEn los niños menores de 2 años existe controversia acerca de si deben recibir o no dietas vegetarianas estrictas por el insuficiente aporte de energía, y el riesgo de carencia de vitamina B12, riboflavina y vitamina D, hierro, zinc y calcio. Esto se ve compensado cuando la dieta incluye lácteos y huevo. Si optas por este tipo de alimentación, siempre debe ir asesorado por un profesional de la salud calificado. (Cuadros C., 2017)
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